Por TAS
Manejar y gestionar un negocio es un gran desafío que considera muchas aristas en las que debes tener un especial cuidado. Dentro de estas está el flujo de caja, que representa una de las bases de funcionamiento de una empresa y lamentablemente, una de las principales razones por las que se llega a tener serios problemas financieros o sencillamente la quiebra.
Pero antes de seguir profundizando en el tema, responderemos la pregunta más sencilla:
¿Qué es el flujo de caja?
Se denomina flujo de caja al dinero que fluye tanto dentro como fuera del negocio, por lo que esto puede fluctuar entre un mes y otro. Lo importante para considerar un flujo de caja óptimo, es que haya suficiente efectivo ingresando a tu negocio porque de lo contrario, se comienzan a presentar las primeras dificultades para visualizar tus ganancias.
Cuando hablas de flujo de caja, te refieres precisamente al equilibrio entre la gestión de las expectativas de ventas que proyecta tu negocio, pero también de los gastos incurridos, como el arriendo o pago del lugar, pago de sueldos de empleados, materiales de producción y compra de productos.
Esto no distingue entre un emprendimiento, pyme o empresa grande, es importante que no se incurran en errores en el flujo de caja, para poder tener buenas proyecciones y crecimiento.
Teniendo en cuenta estos antecedentes, queda muchísimo más claro lo que significa el flujo de caja y lo relevante que resulta para evaluar el éxito o fracaso de un negocio. Suena bastante sencillo cuando lo planteamos, es muy parecido a lo que vivimos día a día con nuestras finanzas personales, pero aunque sea así, un gran número de emprendimientos y pymes fracasan por esta causa.
Principalmente tienen problemas de gastos excesivos, de flujo negativo de caja y problemas con las propuestas de gastos, en las que las proyecciones no son muy tangibles, ni realizables.
Es por esto que en esta ocasión hemos elaborado un listado con los errores más comunes y cómo solucionarlos.
Comenzar gastando demasiado
Es importante que consideres un gasto conciso y preciso para comenzar con tu negocio. Sabemos que las ganas de llegar al éxito son tan grandes que muchas veces se exceden en gastos para poder brindar el mejor servicio, pero este es uno de los errores más comunes. Lo importante es la cautela.
Desde el inicio debes cuidar del capital del que dispones, gasta lo necesario, pero no te excedas en artículos caros o en el momento innecesarios, no desesperes, porque con buenos resultados, podrás comprar estos productos en el mediano plazo.
No llevar un registro de todos los gastos
Realizar un seguimiento de todos los ingresos de efectivo y los gastos en tu negocio es vital para poder gestionar el flujo de efectivo y tener un óptimo flujo de caja. Pero aunque no lo creas, son muchos los negocios que no llevan este registro exhaustivo y pierde información valiosa en el camino.
Lo ideal es que los dueños de los negocios realizan un seguimiento de los gastos desde el inicio de la puesta en marcha de la empresa, tomando nota y teniendo claro el plan de negocios.
Conocer el capital inicial, las primeras ventas, los primeros pagos a proveedores, cuanto es el dinero que sale e ingresa del negocio permite administrar un flujo de caja completamente óptimo y operativo.
No tomar en cuenta la estacionalidad
Este es un factor que es poco considerado, la mayoría de los negocios tienen periodos con peak de ventas, pero también con una baja de ventas, esto definido por la estacionalidad, que quiere decir esto, por ejemplo un negocio de helados, tiene su temporada fuerte en verano, mientras que invierno tienda a bajar.
Es aquí cuando la gestión debe ir en sintonía con estos factores, administrando de forma consciente el flujo de caja, conociendo la baja temporada y tomando decisiones más acotadas.
Es por esto que debes tomar decisiones distintas cuando estás en temporada alta, que te permite tener mayor adquisición y también incurrir en mayores gastos, como en temporada baja en las que es recomendable tomar asuntos que no pudiste ver en momentos álgidos, que tienen que ver con la administración del negocio y procesos creativos, pero sin descuidar el flujo de caja.
Incapacidad de cobrar cuentas vencidas
En esto es muy importante que consideres el orden de tus cuentas como algo muy serio, cuando tienes proveedores debes pagar por sus productos en fechas estimadas y debes tener claro cual será el flujo de caja en ese momento. Las proyecciones de tu negocio son muy relevantes.
Pero también es importante que sepas cobrar, cuando das la oportunidad a tus clientes de pagar en fechas posteriores, tienes que procurar que esto se haga efectivo, porque por el contrario, el flujo de caja sufre todas las consecuencias.
Los pagos impagos pueden afectar directamente al servicio que brindas y eso es algo que todos debemos evitar en la gestión de un negocio.
Resumen
El flujo de caja debe ser una de las grandes preocupaciones cuando se trata de la gestión de un negocio. Aunque las consecuencias del mal manejo se hace evidente a mediano plazo, muchas son las empresas que fallan en este asunto.
Fallas en el flujo de caja son una de las principales razones de negocios desertores, por lo que es importante que tomes todos los cuidados y seguir las recomendaciones que se presentan para evitar problemas futuros y poder tener un negocio sano.
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